martes, febrero 22
What if...
Para alguien como yo verse obligada a plantearse la posibilidad de un embarazo y el cambio radical de vida que implica es estresante. Mucho.
Yo soy una mina a la que no le gustan las sorpresas. Necesito organizar. Programar.
Desde Mayo del año pasado cuando quedé embarazada y lo perdí, tuve al menos 3 atrasos grandes que me obligaron a someterme a los populares tests caseros de embarazo y los consiguientes devaneos mentales tan propios de la situación y de quien les escribe.
Hoy estoy de nuevo ahí.
Creía estar despreocupada, pero no. Sueño sueños tortuosos que incluyen a mi mamá.
Y no.
Y hago cuentas con los dedos.
Y busco otras causas.
Tengo una prueba de embarazo en el bolso y montones de torturas en la cabeza.
Sobretodo tengo miedo.
No me acostumbro. No creo que alguien lo haga.
Y mañana temprano la haré. Sola. Porque vos estás lejos. A veces demasiado.
Yo soy una mina a la que no le gustan las sorpresas. Necesito organizar. Programar.
Desde Mayo del año pasado cuando quedé embarazada y lo perdí, tuve al menos 3 atrasos grandes que me obligaron a someterme a los populares tests caseros de embarazo y los consiguientes devaneos mentales tan propios de la situación y de quien les escribe.
Hoy estoy de nuevo ahí.
Creía estar despreocupada, pero no. Sueño sueños tortuosos que incluyen a mi mamá.
Y no.
Y hago cuentas con los dedos.
Y busco otras causas.
Tengo una prueba de embarazo en el bolso y montones de torturas en la cabeza.
Sobretodo tengo miedo.
No me acostumbro. No creo que alguien lo haga.
Y mañana temprano la haré. Sola. Porque vos estás lejos. A veces demasiado.